Existen tantos tipos de relaciones como personas en el mundo. Por eso, hoy queríamos hablaros de ellos y recomendaros otras formas de conoceros a vosotros mismos.

Algunas investigaciones aseguran que la exclusividad sexual no es innata, es decir, que no pertenece a nuestra naturaleza humana. Defienden que a esta exclusividad han contribuido factores como las enfermedades de transmisión sexual y la necesidad de estrechar la cooperación y las relaciones de parentesco. Otro factor sería la implicación del amor romántico a lo largo de la historia en las relaciones humanas.

Cada vez más, las parejas deciden experimentar y salir de su zona de confort. Por esto, no solo existen las relaciones monógamas. Podemos encontrar relaciones abiertas, poliamor, anarquía relacional, poligamia religiosa… A día de hoy no conocemos bien este tipo de relaciones, a continuación, hablaremos un poco más sobre ellas.

Relaciones abiertas

Una relación abierta es un tipo de relación en la que los integrantes de esta no son sexualmente exclusivos de forma consensuada. Es decir, que pueden tener sexo con otras personas, pero habiendo llegado a un acuerdo previo con la pareja. En general, son relaciones románticas (entre dos o más personas) que permiten el sexo fuera del núcleo de la relación, pero no vínculos románticos. A su vez, dentro de este tipo de relaciones puede haber variantes como son:

  • Las relaciones abiertas por definir. Son relaciones abiertas cuyos límites se definen a medida que se plantean. Por ejemplo, si acabas de conocer a una persona y quieres hablar con ella sobre ver a otras personas.
  • Las relaciones abiertas tipo ‘ojos que no ven, corazón que no siente’. Relaciones abiertas en las que se tiene libertad para ver a otros, generalmente sin vínculos románticos. Por ejemplo, cuando le dices a tu pareja que puede tener aventuras, pero que no quieres detalles.
  • Las relaciones abiertas tipo ‘regla de los 100 kilómetros’. La relación se puede abrir durante un periodo temporal. Por ejemplo, mantienes una relación monógama, pero te vas un año a estudiar fuera y durante ese tiempo ambos podéis ver a otras personas.
  • Las relaciones abiertas tipo ‘fetiche’. Esta permite explorar a una o a las dos partes de la pareja, ya sea juntos o por separado. Por ejemplo, si a tu pareja le gusta el sadomasoquismo, a ti no y llegáis a un acuerdo para que pueda llevar a cabo este tipo de prácticas con otras personas.
  • El ‘swinging’ o intercambio de parejas. Por ejemplo, si tu pareja y tú vais a un club de ‘swingers’.

Poliamor

Una relación poliamorosa es un tipo de relación romántica y/o sexual con otras personas, de forma consensuada. Puede tener connotaciones distintas según la persona y se suelen excluir las relaciones que son puramente físicas o sexuales. Al igual que en el caso de las relaciones abiertas, dentro del poliamor también hay variantes:

  • El poliamor jerárquico. Una estructura poliamorosa en la que una pareja o núcleo tiene prioridad sobre el resto de relaciones que tiene una persona. Por ejemplo, si tienes parejas secundarias, pero solo una principal.
  • El poliamor no jerárquico. En este tipo, ninguna relación romántica tiene privilegios sobre las demás. Por ejemplo, si tienes más de una relación y son todas igual de importantes para ti.
  • La polifidelidad. Aquí, el núcleo poliamoroso no permite incluir a otro más sin tener la aprobación de los demás integrantes del grupo. Por ejemplo, si tienes dos parejas y no quieren que se una nadie más no podría ser posible.
  • La polisoltería, que es una relación basada en el poliamor en la que se evita seguir los modelos de una relación convencional. Por ejemplo, si tienes pareja pero no aspiras ir a vivir con ella.
  • El poliamor abierto, que consiste en que los participantes están abiertos a la posibilidad de la adición de relaciones o amantes. Por ejemplo, si tienes una relación poliamorosa pero puedes acostarte con otras personas.
  • Las relaciones poli-mono, que es cuando una persona monógama tiene una pareja que es poliamorosa. Por ejemplo, si eres poliamoroso y tu pareja no, pero habéis conseguido que funcione.

Para profundizar más en el tema, os dejamos con Amarna Miller y sus recomendaciones de libros sobre poliamor.

Anarquía relacional

También podemos hablar sobre lo que es la anarquía relacional, que es menos conocida. Es una filosofía que no prioriza las relaciones románticas sobre las demás, sean románticas o no. Existen activistas que promueven esta filosofía como, por ejemplo, Roma de las Heras. Estos activistas aseguran que la anarquía emocional implica no solo que se produzcan cambios en el aspecto afectivo de las relaciones, sino que se produzca necesariamente un cambio en la organización de la sociedad para poder así desmontar jerarquías y privilegios. Por ejemplo, si tienes pareja y no estás de acuerdo en dedicar tu energía y centrar tus proyectos vitales en una relación romántica.

Poligamia religiosa

Por último, hablaremos de la poligamia religiosa, quizás la más conocida. Este es un sistema que permite, en la mayoría de ocasiones al hombre, tener varias parejas debido a motivos espirituales.  Por ejemplo, si eres musulmán y tienes tres esposas.

Y ahora que ya sabemos un poco más sobre los diferentes tipos de relaciones, podríamos hacernos esta pregunta… ¿son esto relaciones basadas en la infidelidad?

Pues la respuesta es no. Las relaciones no monógamas se basan en el consenso para poder funcionar. Sin él, habría infidelidad.

Si quieres saber algo más sobre este tipo de relaciones, entra en esta lista de reproducción que te dejamos.

Pero no solo los youtubers hablan sobre ello. Si te gustan las series tanto como a nosotros, no puedes perderte nuestras recomendaciones de series que tratan la sexualidad de una forma muy natural.

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